Descripción
La muerte en el mundo prehispánico era una realidad con la que se convivía; en su pensamiento no existía ruptura entre los extremos vida-muerte. Las sociedades de entonces integraron la muerte en su ciclo cosmogónico como una circunstancia más del devenir: al morir se renace; ésta era la idea básica y de ella se desprendió la concepción de permanencia y dualidad.
¡La muerte es una fiesta!